El resultado

Como ya os he comentado en otra ocasión, los comienzos que para todo el mundo son difíciles, a mi no me lo parecieron. Tuve la suerte de preparar  mi sueño con mucho tiempo de antelación, y la suerte también de contar con mi madre y mi pequeña. Necesitábamos buscar proveedores. Para ello yo tenía un larga lista ya planeada de otros sitios donde había trabajado con anterioridad y muchos que los conocía de tanto empaparme las revistas de decoración que desde muy jovencita habían sido mi pasión. Lo mejor en estos casos es conocerlos en algún lugar donde expongan sus artículos y donde es fácil buscar nuevos horizontes. Y así lo hicimos. Planeamos ir de feria en feria mientras tanteaba que quería hacer. No tenia ni siquiera muy claro  que estilo o como quería que fuese mi futura tienda. Cuando en el verano de 1996 mi madre y yo una tarde  en la playita y después de haber hablado sobre el tema con un amigo que se dedicaba a esto de la decoración, nos recomendó que como en septiembre se celebraba en Valencia la feria del  mueble no nos la perdiésemos. Pues dicho y hecho nos liamos la manta a la cabeza y nos fuimos de gira a Valencia. Menudo palizón nos dimos. Fuimos para no hacer noche y volvernos en el autobús nada mas terminar de recorrernos la feria durante todo el día…..pero mereció la pena. Vimos cosas espectaculares, increíbles….todo era alucinante….pero yo vine con un cacao en mi cabeza de órdago.Claro que me gustaba todo lo que allí había visto, pero allí todo eran escenarios de 100 y mas metros cuadrados, exposiciones de dimensiones de infarto y yo lo intentaba trasladar a mi mente en lo que yo tenía planeado (un local de unos 40 m cuadrados mas  o menos) y todo me daba miedo. Así que comenzamos lo primero a buscar por Granada locales al regresar de las vacaciones. Y ya sabéis que encontré el local de mis sueños y cual fue el resultado final. Aquí os dejo algunas fotos mas de aquel maravilloso resultado.